miércoles, 14 de mayo de 2008

" Desapariciones "

Una emotiva canción que oí a Maná hace un tiempo me sugirió esto:

Soy un alma que vaga entre cañaverales, juncos y charcos sin encontrar nada ni a nadie.

Mi cuerpo quedó allí entre esos mismos juncos para siempre.

Mi único consuelo es que no estoy solo, que hay otras almas como yo por aquí.

Unicamente cuando mi madre, mis hijos o mi mujer me tienen en sus mentes renazco un poquito.

¿ Qué mal hice?

¿ A quién ofendí ?

Si luchar con la palabra por lo que uno cree es un delito, yo estoy penando eternamente.

Estas preguntas se quedarán sin respuesta.

Simplemente yo estaba allí.

Mi nombre era Oswaldo Martínez.

Me " desaparecieron un catorce de Mayo.

1 comentario:

Antonio Aguilera N dijo...

Lo primero que hice en mi visita a Buenos Aires fue visitar la Plaza de Mayo. Era jueves, allí estaban las madres, las abuelas, lanzando su silencioso grito. Nadie las ha podido ni las podrá callar. Llevan 32 años luchando por la vida a la que les arrebataron un trozo para echarlo a los cañaverales.

Realmente impresiona: Les vuelvo a enviar renovados ánimos.

La canción original de Desapariciones es de Rubén Blades, y una versión que siempre me ha impactado es la que hacen unos porteños, Los Fabulosos Cadillacs.

¿Cómo se les habla a los desaparecidos? Con la emoción apretando por dentro.